¡Sólo es Válido Confiar en mí!

     Opté por confiar mas en mi y actuar, porque el parloteo se volvió común y accesible y lo peor de todo es la compañía de la no acción. Así se van volviendo las cosas con el tiempo que sigue avanzando y cada vez nosotros nos vamos atrasando; es como si paso de moda usar las neuronas, como si ya no es genial pensar diferente ni tener un buen tema de conversación, ya no se conversa, ahora la juventud ha decidido darle la razón al dicho que odio tanto (y no recuerdo mucho) pero es algo como que: “Para ser viejo y sabio hay que ser joven y estúpido”. Es un insulto para mí pero, de verdad, ya solo falta envejecer porque bien estúpidos que estamos siendo.

     Para lograr grandes cosas no hace falta edad, y aunque odio las etiquetas sociales, ES ILÓGICO educar jóvenes para la paz de un mundo que la ataca, o por lo menos educarlos con una paz (pasiva y paciente) que no hace nada, que no responde. El mundo no esta bien, es cierto, pero cuando se es minoría es necesario plantarse y alzar la voz,  quien no levanta la voz nunca podrá cambiar ni el sabor de su empanada.

     Tu no llegas a un kiosko y dices dame un desayuno, tu levantas la voz para llamar la atención y dices me das dos empanadas de pabellón y una pepsi, pero si te acuerdas gritas disculpa pepsi no, una malta. Y así va la vida, yo no fui a la universidad a rumbear pero bien que lo disfrute, no iba al gimnasio por los demás pero bastante días de glúteos que me tripie; por eso, es estúpido decir que no vas a la playa a que te vean porque, entonces, nos bañariamos con ropa. Tampoco esta mal decir soy vegetariano, lo malo es que te escondas cuando empieza a salir el humo de la parrilla.

     La vida no es como tu rutina de ejercicios que llevas tiempo y repeticiones, la vida comenzó con un llanto, luego aprendiste a conseguir cosas con el llanto para descubrir que ni que llores llegan tus sueños a ti; pues, de eso se trata de que no es solo yo hoy quiero, porque los sueños no se cumplen solo con el deseo faltan noches de lagrimas, días eternos, insomnio, frustración y otras cosas no tan bonitas para lograrlo. A veces en loa retorcidos camino creemos que ya no vale de nada, pero solo muere quien deja de soñar, porque si no persigues un sueño ¿Para que vives?

     Podemos sonreír hoy y llorar mañana, no puedes pedir a la noche que ilumine y al día que oscurezca, pero si puedes hacer que en tu vida lo ajeno se convierta en propio, pero a con todo y eso, hacer que nada te afecte.