domingo, 18 de marzo de 2018

¡Gracias por haberme dado de ti lo mejor!


     No me diste alas, nunca me las diste; pero lo mejor fue no cotarlas y brindarme herramientas para poder construir con realidad un futuro en el que te esperaba pero en que el que te recordare como ese hombre real y lleno de amor que caminó detrás de mi como aquel padre que vigila los pasos de su niño mientras se tambalea aprendiendo a caminar, como el ser mas protector y que cuidaba tanto. 

No puedo olvidar como tan detallista nunca te faltó detalles para mi, como verme pasar sin saludar era un silbido muy fuerte que me hacia regresar, eres tan especial que me adoptaste como hijo, ese hijo igualito a ti pero que solo te unía un lazo de amor. Debo destacar tu buena memoria y tu manera única de llamarnos a todos tus hijos, porque aunque solo 3 eran tenias muchos prestados.

     Valiente, amoroso, detallista, trabajador, protector, fuerte, agil, con una solución para todo; si fuera mas joven diría que fuiste siempre mi héroe, pero siendo honestos eres uno de esos ejemplos que encabezan mi lista, es que eras tan sencillo y humilde que era muy sencillo quererte aun en tu ser tan testarudo y un poco gruñon, en tu ser y hacer las cosas solo a tu modo y en que tus cosas no se tocan porque tu eres el que bien las usa.

     "Por si algún día te olvido, aunque no creo olvidarte aquí comienza mi promesa de amor" nunca te prometí nada pero fuiste parte de todo, no quisiste ser infinito pero nos llenaste de motivos para recordarte, en mi mente atesorare cada momento a tu lado y cada enseñanza dada y las que no tenias la intención pero se quedan grabadas en mi. Te llevo en mi piel por cada beso lleno de amor, por cada abrazo de los que solo tu me dabas y por cada suave bofetada cargada de afecto y sobre todo por los te amo y cada demostración de amor que siempre hubo.

     Se que aunque quede sin memoria nunca te iras de mi porque te amo con el amor de un niño, ahora soy irreverente adulto y rebelde como un joven que no encaja y que lucha por hacerlo, no tiene que ver con lo que me haz enseñado, sino con mi manera de sellar los ciclos; con mi forma de asumir tu fortaleza que me hizo vulnerable al punto que duele mas saberte débil, sometido a una fuerza desgarrante que saber que ahora solo queda hacerlo a tu modo.

       Estoy convencido que no hay mayor honor para quien vivió dejando su alma, hablando bajito pero con fuerza y Amando como si uno hubiese final; como si este final no importará como si este final antecede el mio, antecede al final que nos unirá en ese abrazo apretado, un beso y una exclamación de ¿como está mi cabeshon? 

     Sin ti serán duros los pasos pero gracias a ti serán firmes y los daré con la certeza de que ahora estás al lado Dios mostrandole que a tu modo las cosas quedan mejor.

domingo, 11 de marzo de 2018

Ahora soy internacional...

Nunca pensé ser un amigo internacional, me animaba el hecho de ser internacional, pero de ninguna forma espere tener mis amigos regados en el mundo. Hoy aunque la situación me obliga a estar lejos no dejo de pensar en lo bonito que seria regresar y reunirme en mi patio, en la misma terraza y en la mismas habitaciones donde fuí tan felíz con personas tan sencillas y alocadas; sin duda habría sido la mejor recompensa. Yo le pido a Dios (todo se lo pido a Él) que permita que mis hijos sepan que venimos del país donde mas tíos se tienen y no por competencia sino porque amamos tan bonito que en una semana ya sabes media vida mia y te quiero como mi amigo de la infancia y si eso sigue creciendo envejecemos como hermanos, sigo soñando que mis hijos conozcan todo esos tíos que hoy por nuestras familias geograficamente nos alejamos un poco.

domingo, 4 de marzo de 2018

Sigo aprendiendo...

  • Choqué tantas veces con la vida que doy fé de que a coñazos aprende el hombre, he chocado y sigo aprediendo; aprendí a alardear menos y a actuar más, a no justificarme porque aún teniendo la razón no la tengo, que las excusas son de personas pobres, que el compromiso es algo de moral y a callarme incluso cuando quiero escupir tu cara, a dar la razón con una media sonrisa y a no gritar cuando tu me hablas fuerte, tambien he aprendido a no herir con lo que digo cuando defiendo mi ideal y que se valen las disculpas cuando falte a una de las anterios, se que algún día esto me hará sabio pero también se que aunque he aprendido mucho aún no lo tengo todo y lo mejor de esto es que puedo seguir luchando, soñando y aprendiendo.