Ha comenzado una nueva historia y todo parece ir bien, sólo algunos detalles, pero Dios se ha botado con la experiencia: Levantarte muy temprano, equipar todo y con todo , hablo de la tristeza, la alegria, el amor, un papá por llenar de amor, una mamá casi pedazo de ti, las ilusiones, amigos que te esperan cada día, cada noche de los que no tienen horario, sobre todo ilusión de que podrá pasar, lo que quieres que pase y lo que posiblemente pase. Seres llenos de amor que te ordenan todo hasta en sus malhumores.
Un jovencito se encarba de hacer parecer animado el recorrido, mientras los árboles no brillan, el viento te acaricia y corre tus lagrimas, tus oidos no distinguen los sonidos. Conversa mucho tú solo quieres calma, pide atención, llora contigo, tú solo callas , él no parece querer hacerlo , respiras y él continúa hablando, quieres que pare, pero él solo dice y dice cosas; piensas en lo cierto del dicho aquel de la estupidez juvenil, comprendes que tiene la razón pero que no es su culpa. Desde la Grecia antigua se decia... solo que ahora es más fácil deslumbrar a los estupidos, mejor dicho a los jovenes xyon ganas de comerse el mundo y que no llegan a ser comprendidos por los adultos. Estos que creen que el orden significa éxito y solo así es posible.
Estás ahí, respiras un aire cargado, no pesado pero si bien cargado de emociones, separaciones, uniones, lagrimas y muchos abrazos fuertes que parecen fusionar dos cuerpos que temen esperar mucho para volver a juntarse. Voces femeninas muy amables van guiando un proceso en el que la ansiedad es el principal elemento. Bienvenido perteneces a este grupo que se marcha, tienes lo que necesitas , esperas ahí al mirar una extensa saala vacía, fría y con vistas al futuro.
Solo te imaginas todo mientras tratas de sonreír, ves pasar tu vida como una película y tratas de detenerte pero recuerdas que afuera hay un manojo de oportunidades.
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