lunes, 15 de agosto de 2016

¡La decisión está en ti!

Al despertar cada mañana damos gracias a Dios, nos sentamos pensamos un poco en lo que será el día, nos levantamos lavamos nuestra cara, ponemos nuestro café a prepararse y esperamos confiados en que todo se de como nuestra mente lo imaginó. Sin imaginar que el mundo exterior tiene miles de situaciones aparte, que cada persona despertó con una necesidad diferente y que por ser parte de este mundo no estamos exentos de ser parte de la situación de alguien más. 

Nuestro vecindario, trabajo o religión nos hacen ser parte de comunidades que casi nunca hemos escogido en las cuales a pesar de todo tenemos la posibilidad de siempre llevar nuestro propio ritmo de vida; el cual debe llevar impregnado de las ganas de lograr cada cosa que nos proponemos, la aceptación de que fuerzas externas influyan  o no sobre tus propias decisiones o que simplemente a nuestro lado viaje alguien mas. Una vez mas traigo a colación ese verso bíblico que sugiere: "que solo tu eres el responsable de perder tu propia PAZ" aunque pocas veces nos encontramos solos en el sendero hay  veces que quizá seremos impulsados y no es lo importante, lo verdaderamente importante es saber de que estas hecho y hacia donde va dirigida tu mirada. la fuerza que imprimes a cada esfuerzo sera la de la misma magnitud de la recompensa que pronto podrás saborear.

Hay retos de nuestra vida que silenciosamente han sido impuestos para vernos brillar, a veces quizá para vernos tropezar. Hacer las cosas bien debe ser nuestro sello, porque no hemos sabido de alguien que apostó a medias y salió victorioso ningún atleta jamás ha logrado llegar a unas olimpiadas sin derramar incontables gotas de sudor, sin pelar sus dientes de rabia o de mucha fuerza, sin haber llorado por lo menos una vez. La vida es la carrera más larga y con menor tiempo que debemos correr, por eso debemos hacerle frente correrla con la mejor actitud porque la mayor parte de las limitantes nos sirven de Vela y nos atrasan en el camino y esos límites se encuentran sólo en nuestra mente.

Cada nuevo reto es una nueva oportunidad de levantarte y saludar las gradas, pero debes asumirlo y hacer que cada segundo de trabajo y cada minuto de descanso lo valgan. Ve y lucha, lucha por ti y lo que te mereces; pocos en tu camino se detendrán a decirte lo grande que eres, pero en tu corazón llevas registro de cada Trasnocho, de cada lágrima, de cada sonrisa de satisfacción cuando logras dar forma a algo.

"Eres el alfarero de tus propios retos, moldealos y conviertelos en victorias"

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